Opinió / Lluís Abbou
Es fácil decir que la pandemia del Coronavirus nos ha dividido. Pero esta no es una simple división entre “nosotros” y “ellos” como la problemática independencia de Cataluña o el Brexit, el inminente divorcio de Reino Unido y la Unión Europea. Ahora todos somos miembros de tribus en constante cambio y éstas son algunas de las que he encontrado:
- Los del gráfico
“Mira la curva. Mira cómo se aplana. Mira cómo se dispara. Mira a Alemania. Mira Francia”, dicen con los ojos abiertos como platos.
Nunca había visto tantos gráficos ni jamás había entendido menos. En parte porque sólo aparecen en la pantalla durante 10 segundos y en parte por el mensaje subliminal: “Todos moriréis”. Estoy seguro de que no soy el único que ve esto, ¿verdad? Una muerte es terrible; 45.000 es demasiado para comprenderlo. Las estadísticas no son lo mío.
- Los héroes no reconocidos
Sólo hace falta recordar sus palabras: “No más aplausos. Aumentos de sueldo, extensiones de ERTEs, ¡respeto!”
- Los policías de barrio
Durante el estado de alarma supervisaron los aplausos y se aseguraron de que nadie saliera de casa. Ahora sospechan de todos los jóvenes: los adolescentes que van al instituto, los jóvenes en las terrazas… Vinculan todo esto con la delincuencia real (robos de bicicletas y apuñalamientos) y por la noche cuando oigo los helicópteros dando vueltas me pregunto qué están buscando. ¿Asesinos? ¿Gérmenes? ¿Personas que ya no pueden sobrevivir económicamente?
- Los falsos positivos
“Bueno, no”, le dirán los pertenecientes a este grupo, “una pandemia no es exactamente lo que esperábamos, pero estar todos juntos en casa ha sido toda una aventura. Milagrosamente, mi otra mitad ha podido compaginar la escuela de los niños y su trabajo. Se maneja muy bien en Zoom. Hemos dado largos paseos en bicicleta en familia. La niña puede que sólo tenga siete años, pero ahora sabe cómo amasar masa madre. Su hermano, desafortunadamente, rara vez sale de su habitación… ¡Niños!”
- Los sabiondos
En este grupo están tus cantantes consentidos, desde Miguel Bosé hasta Van Morrison. Pero conozco gente “normal” que piensa que Bill Gates está tratando de matarnos. Es sólo una gripe.
- Los epidemiólogos autónomos
Han leído un estudio basado en Estados Unidos que decía que los restaurantes eran seguros y uno de Japón donde se decía que no debemos hablar en voz alta.
También hablan mucho de Suecia, aunque nunca han estado. Piensan que la información es poder.
- Los ecológicos radicales
“El Coronavirus es positivo porque, mira, podemos estar muriendo, pero estamos salvando al planeta de los aviones, los coches y los viajes sin sentido. Y sólo necesitamos trabajar dos horas a la semana… el resto del tiempo podemos plantar judías mágicas.”
Un virus mundial no es una solución radical a una crisis de nuestra propia creación.
- Los existencialistas
“Al fin y al cabo, todos moriremos,” dicen.
- Los de “Lo tuve en diciembre del año pasado”
Conozco a varias personas que afirman haber tenido COVID en noviembre-diciembre del año pasado, 2019 ––antes de que apareciera en Wuhan. Son el mismo tipo de personas que dicen que tienen gripe cuando tienen un resfriado.


De Manacor a Londres seguint els passos d’Ian Fleming i estudiant Filologia Anglesa a 1.752km de Mallorca